La selección de Francia de handball se consagró por cuarta vez en su historia campeona del mundo, al derrotar en la final del torneo a su par Dinamarca por 37-35, este domingo en Malmo, Suecia. El partido se definió en el tiempo reglamentario luego de que igualaran en 31 en los sesenta minutos.
Es el cuarto título, segundo consecutivo de los franceses, campeones del mundo anteriormente en Islandia'95, Francia 2001 y Croacia 2009.
Momento en el que la otra gran estrella del conjunto danés, el jovencísimo portero Niklas Landin decidió rebelarse contra un guión.
El 31-31 con un lanzamiento final de Bo Spellerberg.
Llevo al tiempo suplmentario donde, pese al empeño de Ladin, que arrancó la prórroga con tres paradas casi consecutivas, Francia impuso su mayor talento, con un magnífico Nikola Karabitic, que evidenció su condición de mejor jugador mundial, y veteranía, representada como nadie por el magnífico Jerome Fernández.
Fernández fue, precisamente, el encargado de cerrar el triunfo francés 37a 35, que permite a los galos sumar su cuarta corona universal.
ESPAÑA FUE BRONCE AL GANARLE AL LOCAL SUECIA 24 A 23
La selección española de balonmano remató su gran Mundial logrando el bronce al derrotar a la anfitriona Suecia, en un partido para el infarto en el que ganó el mejor equipo. El combinado español logra esta forma su segunda medalla mundialista, después del oro conquistado en Túnez
El conjunto dirigido por Valero Rivera sin hacer ni mucho menos un gran partido, España salió adelante. En los momentos clave aparecieron los jugadores Alberto Entrerríos, Arpad Sterbik o Joan Cañellas y esa defensa que nos ha hecho grandes en Suecia.
A pesar de todo, España mandó en el marcador durante la primera mitad del primer período.
La defensa 5-1 y la entrega de todos y cada uno de los que estuvieron en pista fue clave. Y cuando se empezó a ir a remolque, los de España no desesperaron. Y ahí, en ese instante en el que el público aprieta más que nunca, en el que el rival está con la moral en sentido ascendente y en el que los árbitros nos habían dejado con uno menos por exclusión de Aguinagalde, fue donde la selección española no falló.
Aparecieron los bloqueos, prosiguieron las paradas de Sterbik y marcaron Julen y Alberto Enterríos y el gol en apoyo del asturiano, el 24-22. Faltaban dos minutos, Suecia marcó un tanto, pero el bronce quedó en España.
Es el cuarto título, segundo consecutivo de los franceses, campeones del mundo anteriormente en Islandia'95, Francia 2001 y Croacia 2009.
Lideró la ofensiva danesa el joven Mikkel Hansen, que pese a sus 23 años se confirmó como uno de los máximos talentos de un deporte, que el ex jugador del Barcelona, parece dispuesto a dominar con su letal lanzamiento.
Sin embargo el tanteador ya reflejaba a cinco minutos para la conclusión del primer tiempo una ventaja de tres tantos (13-10) para el equipo galo, y los Fernández, Gille o Karabatic ( mejor jugador del mundial) supieron administrarla con inteligencia hasta llegar al ecuador de la segunda mitad.
Momento en el que la otra gran estrella del conjunto danés, el jovencísimo portero Niklas Landin decidió rebelarse contra un guión.
El 31-31 con un lanzamiento final de Bo Spellerberg.
Llevo al tiempo suplmentario donde, pese al empeño de Ladin, que arrancó la prórroga con tres paradas casi consecutivas, Francia impuso su mayor talento, con un magnífico Nikola Karabitic, que evidenció su condición de mejor jugador mundial, y veteranía, representada como nadie por el magnífico Jerome Fernández.
Fernández fue, precisamente, el encargado de cerrar el triunfo francés 37a 35, que permite a los galos sumar su cuarta corona universal.
ESPAÑA FUE BRONCE AL GANARLE AL LOCAL SUECIA 24 A 23
La selección española de balonmano remató su gran Mundial logrando el bronce al derrotar a la anfitriona Suecia, en un partido para el infarto en el que ganó el mejor equipo. El combinado español logra esta forma su segunda medalla mundialista, después del oro conquistado en Túnez
El conjunto dirigido por Valero Rivera sin hacer ni mucho menos un gran partido, España salió adelante. En los momentos clave aparecieron los jugadores Alberto Entrerríos, Arpad Sterbik o Joan Cañellas y esa defensa que nos ha hecho grandes en Suecia.
A pesar de todo, España mandó en el marcador durante la primera mitad del primer período.
La defensa 5-1 y la entrega de todos y cada uno de los que estuvieron en pista fue clave. Y cuando se empezó a ir a remolque, los de España no desesperaron. Y ahí, en ese instante en el que el público aprieta más que nunca, en el que el rival está con la moral en sentido ascendente y en el que los árbitros nos habían dejado con uno menos por exclusión de Aguinagalde, fue donde la selección española no falló.
Aparecieron los bloqueos, prosiguieron las paradas de Sterbik y marcaron Julen y Alberto Enterríos y el gol en apoyo del asturiano, el 24-22. Faltaban dos minutos, Suecia marcó un tanto, pero el bronce quedó en España.