PARECÍA QUE GANARÍA "ALUMNI" PERO GANÓ EL "MAESTRO" FUE 14 A 11
Lo abrazan, lo besan, lo aplauden. Tenía que ser él. Benjamín Madero, el mejor jugador de este URBA Top 14, se despojó de sus nervios y, en la última pelota del segundo tiempo del alargue -fue la segunda definición de este tipo en la historia-.
Ni Steven Spielberg hubiese podido escribir un guión semejante. Sufriendo, luchando todo el partido contra las embestidas de Alumni.
Pero esta alegría que, en un suspiro, recorrió a los hinchas del SIC de pies a cabeza también vino acompañada de la autocrítica, del sinceramiento. “Estoy feliz, pero la verdad es que Alumni mereció más; jugó mucho mejor que nosotros”, declaró Rolando Martin, entrenador de campeón.
Intentó varias veces fue González Iglesias, pero el goleador del torneo,vaya paradoja, no estuvo justo. Sobre el final, cuando los nervios ya rozaban lo insoportable, tiró uno, dos, mil drops para que el título viajara a Tortuguitas, pero la pelota, caprichosa, nunca le hizo caso a su puntería. O quedaba corta, o pegaba en el palo, o se iba ancha. Adentro, nunca.
El SIC aguantó y, a dos minutos del cierre, tuvo un scrum a cinco metros del in-goal. Ya con tiempo cumplido, hubo pase para Benjamín Madero y el 10 fue el encargado de clavar el drop final que desató la locura y la conquista del campeonato.
Por segundo año consecutivo, los de San Isidro pueden gritar que son los campeones de la URBA. Con este nuevo título, alcanzan un total de 25.
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