sábado, 10 de diciembre de 2011

EL DERBY ESPAÑOL FUE PARA EL BARCELONA



LA TÁCTICA DE PEP DERROTÓ A UN REAL QUE SOLO FUE VERTICAL CUANDO EL BARZA SE LO PERMITIÓ 

Un nuevo triunfo acumuló el Barcelona, previo a su viaje a Japón donde ira por la Copa Mundial de Clubes, y en la Casa Blanca. El Real Madrid se puso 1-0 a los 22 segundos, tras un error de Valdés, pero lo dio vuelta con goles de Alexis Sánchez, Xavi y Fabregas y, con un partido más, alcanzó al Merengue en la cima. Y además Messi .
Iban menos de treinta segundos cuando Víctor Valdés recibió la pelota y su despeje de primera le quedó a Di María, quien la metió en el área y tras una serie de rebotes, la pelota derivó en Benzema y la empujó al gol.
Pero el Barcelona aceptó el golpe y respondió,una electrizante corrida de Messi, desde la derecha y hacia el medio, terminó en un zurdazo rasante que hizo lucir al 1 local, Iker Casillas. El clásico se puso de ida y vuelta, los de Mouriño no renunciaban a atacar, y el Barza respondía.
A los 29, Messi arrancó como sólo él puede hacerlo por el medio y cuando parecía que la perdía habilitó al chileno Aléxis Sánchez, que con un derechazo rasante hizo estéril el vuelo de Casillas y marcó el 1-1.
Desde aquí se aplacó un poco, el equipo blanco que ya no iba con tanta velocidad, y el azulgrana catalán empezaba a pensar y creo que desde ese momento se gestó el triunfo.
Comenzó el segundo tiempo y también comenzó el funcionamiento del Barcelona, Piqué y Puyol atrás, un Xavi e Iniesta que se conectaron, un Fábregas con llegada y un Messi que se encargó del resto, amalgamar todo y sacar la diferencia.

              

Que llegó de un rechazo de la defensa merengue le llegó a Xavi, que cerca de la media luna del área la agarró de aire y su tiro que iba cruzado se desvió en Marcelo y le cambió la dirección a Casillas, que desde el piso no pudo más que mirar el segundo gol del visitante.
Y posteriormente un Messi que tomó la pelota por derecha y veloz como siempre se lanzó hacia delante. Cuando Sergio Ramos salió a su encuentro, el rosarino la abrió para uno de sus socios predilectos, Dani Alves, que llegó al fondo y soltó un centro perfecto para que Cesc Fábregas, a la carrera y de cabeza estampó el 3-1.
Todo definido, no hubo tiempo para más del Real Madrid. Y el Santiago Bernabéu que cada día le sienta mejor al Barsa. Basta con recordar el 6-2 del 2 de mayo de 2009 y el 2-0 con el que dejó afuera al Real Madrid de la Copa de Campeones el 27 de abril de este 2011 que ya se va.
Mou tendrá que replantearse los derbys, tal vez hasta de para escribir un nuevo libro “Porque tantas derrotas contra el Barza”.

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