NESTOR ORTIGOZA, SANGRE ARGENTINA GARRA GUARANÍ
La pasada fecha del fútbol argentino tuvo una figura sobresaliente, no hizo goles, no es delantero, solo jugó con la pelota e hizo jugar a sus compañeros. Néstor viene ya hace un tiempo, tranquilo y silenciosamente un buen nivel, un volante que tiene inteligencia, habilidad y además fuerza, difícilmente se le pueda sacar un pelota que tenga dominada.
Se lo tilda de volante defensivo, de quite, y creo que allí radica la confusión de los técnicos y jugadores rivales, lo descuidan y olvidan o no saben que es un excelente dominador del balón.
Nacido en San Antonio de Padua, localidad del oeste del gran Buenos Aires, en la provincia del mismo nombre. Hace 26 años recién cumplidos por el 7 de octubre, se inició en el mismo club que lo vio crecer y hacerse hombre, Argentinos Juniors, el último campeón de Argentina, y tras un muy breve paso por Chicago en el 2005, volvió al bicho de la Paternal hasta la fecha.
Diego Maradona lo convocó en el 2008 para la selección local, pero no se pudo concretar por el triangular final que definía el torneo local de ese año.
Entonces otro entendedor del buen fútbol lo vio y no dudó, el Tata Martino lo llamó para la selección de Paraguay, solo lo pensó un poco y se nacionalizó por tener el padre nativo de ese país, Martino le aseguraba un mundial, y Diego muy difícilmente lo pudiera llevar a Sudáfrica.
Y así ocurrió la selección albiroja llegó a cuartos de final de Sudáfrica 2010 siendo parte de la gran perfomance sudamericana en el torneo.
A su regreso fue condecorado en Paraguay junto a sus compañeros por la Presidencia de dicho país. Seguramente lo veremos en la próxima copa América desplegando su excelente juego.
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